A veces se tiende a olvidar que en toda empresa los procesos de innovación son llevados a cabo por personas y que debemos de asegurar que los equipos tengan las habilidades, conocimientos y el entorno adecuado para llevar adelante proyectos innovadores.
Un elemento clave para ello es contar con un equipo ágil.¿Qué significa esto?: “Asegurarnos de tener a las personas adecuadas para generar Genio Colectivo: talento unido en rebanadas perfectas para hacer algo mejor incluso que un talento individual fuera de serie”. (Linda Hill)
Para lograr innovaciones exitosas las empresas no pueden funcionar como silos sino que deben ser redes de equipos o equipo de equipos. Para ello deben asegurarse de que los equipos tengan todos los roles que se requieren:
Artistas cuyo talento es la imaginación, innovan a través de la experimentación , valoran la novedad. Son capaces de ver más allá e imaginar lo que podría ser.
Ingenieros cuyo talento es la disciplina de crear a partir de procesos, valoran los estándares y el control. Son capaces de ordenar los procesos creativos.
Sabios cuyo talento es la empatía. Viabilizan la reflexión en equipo, asegurando la armonía e integridad a lo largo del proceso.
Atletas cuyo talento es el coraje. Enfrentan los desafíos buscando el logro y cumplimiento de objetivos y resultados.
Todos estos roles son complementarios. Ninguno es más importante que el otro, pero juntos tienen la potencia necesaria para imaginar nuevas soluciones, desarrollarlas y experimentarlas una y otra vez, conjugando diferentes visiones y habilidades, venciendo los obstáculos, y asegurando el éxito en su entrega.
Estos equipos a su vez requieren de una cultura de innovación que les facilite y brinde mayor empuje a sus procesos de innovación. Para esto, la empresa debe ser capaz de identificar cuáles son los comportamientos de los colaboradores en temas de innovación y cuáles son los aspectos que la impulsan o inhiben. También la empresa requiere de seguridad psicológica, de forma que los colaboradores puedan confiar entre si y discutir e interactuar con franqueza. Una vez identificados estos Habilitadores y Bloqueadores la empresa puede tomar acciones para potenciar los primeros y disminuir en lo posible los segundos. Recordemos que como dice Peter Drucker, “la cultura se come a la estrategia en el desayuno”.
Cynthia Robert
Directora Ejecutiva ASCELERACIÓN
